Leer más rápido para estudiar mejor: técnicas de lectura rápida para opositores
Métodos de estudio
Cuando eras pequeño es muy probable que alguna vez escucharas a tus padres hablarte sobre lo bueno que era leer y que intentaran inculcarte un hábito de lectura. Con la llegada de la vida adulta, y especialmente, de las oposiciones, leer algo más que los apuntes se puede hacer un poco cuesta arriba. Pero hoy queremos hablarte de calidad más que de la cantidad. Es decir, de los beneficios de aprender a leer más rápido para estudiar mejor con algunas técnicas de lectura rápida para opositores.
Mejorar la habilidad de leer rápido es una herramienta muy válida para optimizar el tiempo al estudiar oposiciones. Un lector medio suele leer unas 200 palabras por minuto, mientras que un lector veloz puede llegar a las 350 o 400. Sin duda un detalle que puede marcar la diferencia, especialmente si lo combinas con otros sistemas de estudio.
Velocidad visual para leer más rápido
Antes de entrar en técnicas más concretas, es importante trabajar la velocidad visual para poder leer más rápido. Para aumentar el ritmo de lectura es recomendable dejar de leer palabra por palabra y aprender a hacerlo en bloques, reduciendo así el número de pausas. Otra recomendación es hacer un ejercicio consciente para eliminar los retrocesos, es decir, no volver atrás a leer palabras o frases que acabamos de leer de forma inconsciente, algo que ocurre con frecuencia.
Skimming y Scanning
Estos conceptos en inglés quizás te parezcan muy modernos, pero no son más que dos técnicas de lectura rápida. El Skimming es lo que solemos llamar leer ‘por encima’, y sirve para ver de qué va un texto y extraer su idea principal, algo increíblemente útil a la hora de enfrentarnos un tema por primera vez, para saber de qué trata antes de leer en profundidad y entenderlo mejor, o para repasar, ya que al extraer la idea principal nos permite quedarnos con lo más importante. Para conseguir un skimming efectivo es recomendable leer los títulos de cada tema, negritas, gráficos y párrafos introductorios, así como la primera y última frase de cada tema para tener una ligera idea de qué trata. Puedes marcar términos que te parezcan importantes para pararte a leerlos después y tomar notas que ayuden a formar una primera idea global del tema.
Por el contrario, el Scanning es útil cuando queremos encontrar datos concretos, es decir, cuando tenemos una pregunta o duda y queremos resolverla a través del texto. Lo más recomendable en este caso es ejercitar la lectura en S buscando elementos específicos de lo que nos interesa, por ejemplo, una letra mayúscula en concreto si es un nombre, o un número si buscamos información numérica. Esta técnica también nos ayuda a priorizar, ya que hay que saber elegir secciones de texto donde el título o subtítulo nos hagan sospechar de que podemos encontrar el contenido que nos interesa.
La utilidad de la técnica del marcador
Esta es una de las técnicas de lectura rápida más sencillas, y como su propio nombre indica, consiste en ir marcando las palabras que estamos leyendo. Su utilidad reside en que esta acción ayuda a establecer una conexión directa entre el texto y nuestro cerebro y proporciona una reducción del esfuerzo ocular. Lo único que necesitas para llevar a cabo esta técnica es usar el dedo como hacíamos de pequeños o algún otro objeto que sirva como marcador como un lápiz o bolígrafo, algo que no obstaculice tu lectura.
Técnica de la fijación
Como comentamos antes, tendemos a hacer pausas entre palabras para que nuestros ojos puedan fijar y enfocar lo que estamos leyendo. Por tanto, la fijación es el punto en el que la vista se detiene para poder leer, y el objetivo de esta técnica es disminuir el número de fijaciones para agilizar la lectura. Nuestro cerebro tiene la capacidad de leer agrupando palabras, por eso es recomendable empezar de esta forma e ir aumentando de forma progresiva la cantidad de texto que alcanzamos con una sola fijación. Para experimentar esta mejora, podemos hacer uso de la técnica anterior e ir marcando los puntos de fijación, lo que nos hará ser conscientes de ellos y nos permitirá ir aumentándolos con el tiempo.
Como siempre, todo es cuestión de práctica y cada opositor necesita un método distinto, pero estamos seguros de que añadir estas técnicas a tu estudio será de gran ayuda. ¡Ánimo con el estudio luducompi! 🙂