Mejora tu estudio usando hojas de distracciones

Si algo caracteriza a todos los opositores son la cantidad de horas que pasan frente a sus temas y apuntes. Durante ese tiempo, la concentración de una persona oscila y a veces puede llegar a perderse del todo. En este caso, tendemos a divagar o ponernos a pensar en otras cosas que tenemos que hacer. Es justo en ese momento, cuando desconectamos por completo y se nos complica el hecho de retomar el estudio.

Para minimizar al máximo los efectos de esas divagaciones, esta semana te traemos una recomendación sencilla, pero realmente eficiente.

Se trata de una hoja de distracción que, a pesar de lo que su nombre indica, te ayuda a evitar que te distraigas 😉.

¿Qué es una hoja de distracción?

La hoja de distracción es un recurso sencillo, pero ingenioso, que puede ser un aliado poderoso en la batalla contra las distracciones. Su propósito no es otro que ayudar a mantener tu concentración y que el estudio te cunda mucho más.

Su funcionamiento es bastante simple: mientras estudias, cualquier pensamiento aleatorio o tarea pendiente que te distraiga, se anota en esta hoja. Esto puede ser desde recordatorios personales hasta dudas sobre el material de estudio. La idea es que, al escribir estos pensamientos, liberes tu mente para centrarte en el estudio sin el temor de olvidar algo importante.

Al final de tu sesión de estudio, revisas la hoja de distracción para asegurarte de que atiendes cualquier punto que hayas anotado. De esta manera, puedes mantener tu flujo de estudio sin interrupciones y asegurarte de que no se te pase nada por alto.

Partes de una hoja de distracción

La hoja de distracción, normalmente, se divide en tres secciones:

Repasar.

Esta sección se reserva a las cuestiones que surgen sobre el estudio. Generalmente, estas ideas surgen al relacionar el concepto que estás trabajando con algo que ya has visto y que no logras recordar del todo bien. En ese caso, acudes a “repasar” y lo anotas.

Dudas.

Aquí se concentran las cuestiones que surgen sobre el tema que estás viendo o conceptos asociados de otro contenido. Si esa duda no es especialmente importante, no dudes en recogerla aquí. De lo contrario, aclararla te llevará un buen rato y hará que pierdas el hilo de lo que estabas estudiando.

Notas.

Espacio dedicado al resto de asuntos de tu día a día: comprar pan, pedir cita en el dentista o escribir a tu mejor amiga. Todos esos temas, por muy variopintos que sean, tendrán ahí su hueco.

Cómo diseñar mi propia hoja de distracción

Diseñar tu propia hoja de distracción es un proceso creativo que te permitirá adaptar esta herramienta a tus necesidades específicas de estudio.

Como siempre te decimos, este tipo de herramientas son realmente personales, así que solo podemos darte algunas pautas y consejos para que su elaboración sea más sencilla. Recuerda que la hoja de distracción es una herramienta flexible que debe servirte a ti, no al revés. Experimenta con diferentes enfoques hasta que encuentres el que mejor se adapte a tu estilo de trabajo.

Para concretar, puedes seguir estos pasos:

Elige el formato adecuado

Decide si prefieres una hoja de distracción digital o en papel. La digital te permite hacer cambios fácilmente y tenerla siempre a mano en dispositivos electrónicos, mientras que la de papel puede ser más tangible y menos propensa a distracciones digitales.

Define las secciones

Basándote en el método tradicional, puedes comenzar con tres secciones principales: “Repasar”, “Dudas” y “Notas”. Sin embargo, siéntete libre de añadir o quitar secciones según lo que mejor se adapte a tu flujo de trabajo.

Personaliza el diseño

Utiliza colores y fuentes que te resulten agradables y que faciliten la lectura. Puedes hacerlo manualmente o con herramientas de diseño como Canva, que ofrece plantillas y elementos de diseño para personalizar tus documentos.

Agrega elementos interactivos

Si optas por una hoja de distracción digital, puedes incluir enlaces a recursos relevantes o listas desplegables para organizar mejor tus tareas y preguntas.

Hazla accesible

Guarda o imprime tu hoja de distracción en un lugar accesible para que puedas anotar rápidamente cualquier distracción que surja mientras estudias o trabajas.

Revisa y ajusta

Después de usar tu hoja de distracción por un tiempo, revisa su efectividad. Ajusta el diseño o las secciones según sea necesario para mejorar tu enfoque y productividad.

Esperamos que con estas indicaciones puedas utilizar tu hoja de distracción cuanto antes ☺️.

¿Qué te parece este truco, luducompi? ¿Conocías alguno parecido?

¡Déjanos tus comentarios e impresiones en nuestras redes!